Entrada a la Mansión Cullen .

me causo gracia la cara de edward al ver a emmet y dije-que pasa edward-

-Nada, me sorprende verlo. Cómo te fue en tu viaje? -recordé que Hayley estaba ahí -Disculpenme, estaban por ir a cazar?

Edward sera mejor que llevemos cuanto antes a Hayley a cazar, si no quieres que huela a Bella y se vuelva incontrolable, tu ya sabes la fuerza que tienen los neofitos. Hayley tiene los ojos demasiado rojos



"El infierno no es tan malo si consigues mantener a un ángel a tu lado"

-Si lo se, recién se me cruzó por la mente al ver la quemazón de su garganta en su mente... estas pensando en cazar -le dije a Hayley sonriendo.

Si, me esta matando... -señalando mi garganta y sonriendo-

-Bueno, supongo que entonces no los entretengo más...

Podia sentir la preocupacion de Edward, temia seguramente que le haga algo a la chica- No te preocupes Edward, no me acercare a Bella, estara bien-espero pense, de verdad no queria hacerle daño-

-Gracias -le dije a Hayley -Claro Emmett, que ocurre?

Rosalie me ha contado lo del accidente de Bella, ¿como esta?

-No se me daba muy bien esto de hablar de temas serios, pero la cara de Edward era como una triste poesia-



"El infierno no es tan malo si consigues mantener a un ángel a tu lado"

-Por lo menos ya salió del coma... pero tiene amnesia, así que Emmett... no te andes con jueguitos con ella si? -sabía como era Emmett.

Esta bien Edward.. dejare mis jueguecitos de lado y sere un angel.
¿Tu como estas? -Me preocupaba, sabia que el no estaba bien. Queria poder ayudarle.-



"El infierno no es tan malo si consigues mantener a un ángel a tu lado"

-Sobrepasandolo? Cuidaré a Bella mientras lo necesite, a parte voy a darle la opción de vivir su vida... pero creo que es demasiado obstinada. Quiere recordar -miré para la casa -Supongo que debería entrar, lleva a cazar a Hayley, seguramente sea algo insignificante viendo su estado pero... creo que sería lo mejor no?

Edward.. se que aveces.. bueno.. aveces no, mejor dicho siempre me comporto de una manera "burlona" se le podria decir, siempre estoy con mis jueguecitos, soy asi. Pero tambien tengo mi parte "humana" alfin y al cavo un dia fui humano, conservo sentimientos aunque no lo parezca. Si necesitas algo, o hablar.. cuenta conmigo. -Me costaba mucho sacar mi lado solidario, pero Edward me preocupaba. El era mi hermano, era muy importante para mi.-



"El infierno no es tan malo si consigues mantener a un ángel a tu lado"

-Lo se Emmett -sonreí -, pero debo aceptar que esta cituación es molesta...

Si tenemos que ir...vamos rosalie? -esta chica si me caia bien-

Llegamos a la mansión Cullen y me bajé del auto. Frenamos en la entrada y golpeé luego giré hacia Lune mientras esperaba que nos abrieran.

Esperabamos en silencio en la puerta.
-¿Es una visita improvisada?

Escuché el timbre, presté atención a quien podría estar en la puerta y sentí sus olores, las Darkya? Imposible. Escuché sus pensamientos y si, eran ellas. Me acerqué a la puerta y la abrí.
-Me sorprende verlas.

Sonreí a Edward y disimuladamente para que Lune no se enterara le hice saber por mi mente que ella no recordaba nada sobre él.
-Buenas tardes Edward, ella es Lune, mi hermana. Lune, él es Edward- hice las presentaciones como si no se conocieran y sonriendo.

Escuché los pensamientos de Sunly, increible.
-Hola -le dije cortezmente -, supongo que un placer. Quieren entrar?

Miré a Lune y entré sin esperar su aprobación. Necesitaba hablar con Edward pero con Lune allí no podía así que esperaría a que ella se fuera de caza o algo.
-¿Y Bella?- le pregunté a Edward intrigada.

-Ya recuperó la conciencia pero tiene amnesia, de a poco va recordando cosas pero le cuesta -vi las intenciones en la cabeza de Sunly, luego hablaríamos o eso creía.

Conque ese era Edward. Sonreí como una idiota, era... era... lindo... Y obviamente me sentí más idiota. No estaba muy metida en la conversación, pero sí en los pensamientos de Sunly y ellos me decían que me fuera. En algo andaba metida.
-Tengo que irme. - le dije a Sunly. Y después me volví a Edward. - En otra nos vemos.
Y fui al bosque... que era lo más cercano que había.